Por IDANIA PUPO FREYRE Foto: Dra. NEISY LÓPEZ
Se mantiene con peritonitis activa y parámetros de ventilación muy elevados; su fallo respiratorio se agrava por día, además, ahora presenta fallos en los sistemas renal, cardiovascular, respiratorio, digestivo y hematológico, incompatibles con la vida; aún así, el niño sobrevive, abre los ojos y hace movimientos espontáneos.
La doctora Blanca Rodríguez, especialista de segundo grado y jefa del Servicio de Cirugía Pediátrica del referido centro ofreció el parte médico y explicó que el pequeño sufre una sepsis peritoneal y también respiratoria asociada.
Está asistido por respiración artificial, con apoyo medicamentoso. Cada cuatro horas se evalúa su estado por un equipo multidisciplinario de cirujanos, intensivistas y anestesiólogos y se reajustan los tratamientos a seguir, dijo la cirujana.
Como en todos los casos que lo requieran, con Luisito no se escatiman recursos y esfuerzos; él fue sometido a tres lavados peritoneales a abdomen abierto, durante viernes, sábado y domingo, para lo cual se creó un pequeño salón de operaciones en la propia UCIP, pues su gravedad no permite el traslado a la Unidad Quirúrgica del hospital. Al cierre de esta información se le practicaba otro de estos procederes.
Muchos de los medicamentos y equipos que se usan en su asistencia son importados. Tiene colocada una malla biocompatible que se usa para reparación de defectos de la paredes del abdomen y contribuir a cerrarla; este aditamento es de procedencia norteamericana, la cual entra por un tercer país porque el bloqueo imperialista imposibilita su compra directa, agrega la especialista.
Ha tenido y mantiene tratamientos con distintos antibióticos como betalactámico (familia de última generación de la penicilina, para contrarrestar gérmenes en extremo agresivos), Meronen, Anfotericin, cefaloxporina de cuarta generación, entre otros, y también soluciones para mejorar el volumen sanguíneo circulante, todos de importación, de altísimo costo en el mercado internacional, continúa explicando la doctora Rodríguez.
Luisito tiene una variante de abdomen abierto, muy propensa a infectar como de hecho sucedió y se le realizan estudios de cultivos para detectar gérmenes y combatirlos.
Respira mediante una máquina (Servo I) de la más moderna tecnología y que con precisión ofrece los parámetros vitales del paciente.
Cada ocho horas se le administra por vía endovenosa plasmas frescos y concentrado de plaquetas. Su grupo sanguíneo es B Negativo (el menos frecuente), y en todo este tiempo no le han faltado los hemoderivados de producción local, a pesar de que ello presupone que 12 personas donen su sangre diariamente para garantizarlos, según informó la doctora Mercedes Ferrer, una de las intensivistas que lo atienden.
Para ello se han activado los potenciales donantes con dicho grupo sanguíneo de todos los municipios de la provincia, quien han respondido a este llamado en un gesto de sumo altruismo, así lo relata el doctor Osvaldo Núñez, hematólogo que dirige Bancos de Sangre en el territorio.
El pequeño paciente tiene dos años y tres meses de vida; procede del central azucarero Bolivia y es el único hijo del matrimonio integrado por Yasiel (24 años y trabajadora social del hospital del municipio de Bolivia), y Luis (34 y Licenciado en Cultura Física).
Su padecimiento de base consiste en una Hipertensión Portal (aumento de la presión del flujo sanguíneo de la vena porta que le producía sangramientos digestivos).
Desde el 17 de octubre ingresa en la UCIP el pequeñín ha sido sometido a tratamientos médicos, endoscópicos y quirúrgicos, realizados por médicos locales, pero no lograron controlar las hemorragias; se requería de una cirugía vascular derivativa, la cual se realizaba sólo en hospitales de Ciudad de La Habana.
La inestabilidad hemodinámica, la dependencia de respiración artificial asistida y el deterioro de la salud de Luisito no permitían su traslado ni por vía terrestre ni aérea.
Entonces se solicitó la presencia del equipo de Cirugía Hepatobiliar y de Trasplante Hepático del Hospital Nacional Pediátrico William Soler, el cual se trasladó a la capital avileña en la mañana de domingo 19 y, tras evaluar el caso, se decide acometer la cirugía de gran envergadura.
Desde las 4:00 de la tarde del propio domingo comenzó a reunirse el equipo procedente de la capital del país, con cirujanos, anestesiólogos y enfermeros avileños. Junto trabajaron ininterrumpidamente en los procederes previos, durante y postoperatorios hasta las 7:00 de la mañana del lunes.
El doctor Ramón Villamil, quien realiza los trasplantes hepáticos a niños en Cuba, y el profesor Rafael Trinchet, presidente de la Asociación Cubana de Cirugía Pediátrica, fueron los cirujanos principales del caso y en todo momento elogiaron la capacidad profesional de sus homólogos locales, de los intensivistas y anestesiólogos y el personal de enfermería que ha atendido este caso en el hospital local.
La vena porta es un vaso sanguíneo localizado en la cavidad abdominal, que se encarga de recoger la sangre procedente de la parte abdominal del tubo digestivo, el páncreas y el bazo, con nutrientes y productos de desecho, para transportarla hasta el hígado, donde se produce su "purificación".
Como consecuencia de varios trastornos en el organismo se origina un aumento de la presión del flujo sanguíneo de dicha vena, es lo que se conoce como hipertensión portal y produce un sangramiento digestivo alto, entre otros trastornos.
La doctora Blanca Rodríguez, especialista de segundo grado y jefa del Servicio de Cirugía Pediátrica del referido centro ofreció el parte médico y explicó que el pequeño sufre una sepsis peritoneal y también respiratoria asociada.
Está asistido por respiración artificial, con apoyo medicamentoso. Cada cuatro horas se evalúa su estado por un equipo multidisciplinario de cirujanos, intensivistas y anestesiólogos y se reajustan los tratamientos a seguir, dijo la cirujana.
Como en todos los casos que lo requieran, con Luisito no se escatiman recursos y esfuerzos; él fue sometido a tres lavados peritoneales a abdomen abierto, durante viernes, sábado y domingo, para lo cual se creó un pequeño salón de operaciones en la propia UCIP, pues su gravedad no permite el traslado a la Unidad Quirúrgica del hospital. Al cierre de esta información se le practicaba otro de estos procederes.
Muchos de los medicamentos y equipos que se usan en su asistencia son importados. Tiene colocada una malla biocompatible que se usa para reparación de defectos de la paredes del abdomen y contribuir a cerrarla; este aditamento es de procedencia norteamericana, la cual entra por un tercer país porque el bloqueo imperialista imposibilita su compra directa, agrega la especialista.
Ha tenido y mantiene tratamientos con distintos antibióticos como betalactámico (familia de última generación de la penicilina, para contrarrestar gérmenes en extremo agresivos), Meronen, Anfotericin, cefaloxporina de cuarta generación, entre otros, y también soluciones para mejorar el volumen sanguíneo circulante, todos de importación, de altísimo costo en el mercado internacional, continúa explicando la doctora Rodríguez.
Luisito tiene una variante de abdomen abierto, muy propensa a infectar como de hecho sucedió y se le realizan estudios de cultivos para detectar gérmenes y combatirlos.
Respira mediante una máquina (Servo I) de la más moderna tecnología y que con precisión ofrece los parámetros vitales del paciente.
Cada ocho horas se le administra por vía endovenosa plasmas frescos y concentrado de plaquetas. Su grupo sanguíneo es B Negativo (el menos frecuente), y en todo este tiempo no le han faltado los hemoderivados de producción local, a pesar de que ello presupone que 12 personas donen su sangre diariamente para garantizarlos, según informó la doctora Mercedes Ferrer, una de las intensivistas que lo atienden.
Para ello se han activado los potenciales donantes con dicho grupo sanguíneo de todos los municipios de la provincia, quien han respondido a este llamado en un gesto de sumo altruismo, así lo relata el doctor Osvaldo Núñez, hematólogo que dirige Bancos de Sangre en el territorio.
El pequeño paciente tiene dos años y tres meses de vida; procede del central azucarero Bolivia y es el único hijo del matrimonio integrado por Yasiel (24 años y trabajadora social del hospital del municipio de Bolivia), y Luis (34 y Licenciado en Cultura Física).
Su padecimiento de base consiste en una Hipertensión Portal (aumento de la presión del flujo sanguíneo de la vena porta que le producía sangramientos digestivos).
Desde el 17 de octubre ingresa en la UCIP el pequeñín ha sido sometido a tratamientos médicos, endoscópicos y quirúrgicos, realizados por médicos locales, pero no lograron controlar las hemorragias; se requería de una cirugía vascular derivativa, la cual se realizaba sólo en hospitales de Ciudad de La Habana.
La inestabilidad hemodinámica, la dependencia de respiración artificial asistida y el deterioro de la salud de Luisito no permitían su traslado ni por vía terrestre ni aérea.
Entonces se solicitó la presencia del equipo de Cirugía Hepatobiliar y de Trasplante Hepático del Hospital Nacional Pediátrico William Soler, el cual se trasladó a la capital avileña en la mañana de domingo 19 y, tras evaluar el caso, se decide acometer la cirugía de gran envergadura.
Desde las 4:00 de la tarde del propio domingo comenzó a reunirse el equipo procedente de la capital del país, con cirujanos, anestesiólogos y enfermeros avileños. Junto trabajaron ininterrumpidamente en los procederes previos, durante y postoperatorios hasta las 7:00 de la mañana del lunes.
El doctor Ramón Villamil, quien realiza los trasplantes hepáticos a niños en Cuba, y el profesor Rafael Trinchet, presidente de la Asociación Cubana de Cirugía Pediátrica, fueron los cirujanos principales del caso y en todo momento elogiaron la capacidad profesional de sus homólogos locales, de los intensivistas y anestesiólogos y el personal de enfermería que ha atendido este caso en el hospital local.
La vena porta es un vaso sanguíneo localizado en la cavidad abdominal, que se encarga de recoger la sangre procedente de la parte abdominal del tubo digestivo, el páncreas y el bazo, con nutrientes y productos de desecho, para transportarla hasta el hígado, donde se produce su "purificación".
Como consecuencia de varios trastornos en el organismo se origina un aumento de la presión del flujo sanguíneo de dicha vena, es lo que se conoce como hipertensión portal y produce un sangramiento digestivo alto, entre otros trastornos.