Mayito fue un protagonista principal en todos los éxitos que tuvo y tiene el béisbol de Ciego de Ávila, por los años que dedicó a formar peloteros y dirigir equipos, de ahí que dejara un legado pedagógico que marcará cada etapa del quehacer de este deporte en el territorio.
Aunque nació un 22 septiembre de 1943 en Santa Clara, desde pequeño
pasó a residir en la capital avileña, donde dejó una vasta obra
profesional que le mereció la condición de Hijo Distinguido de Ciego de
Ávila, entregada post morten a sus familiares.
En la categoría juvenil ganó el primer Campeonato Panamericano y el nacional de esa categoría.
En la categoría juvenil ganó el primer Campeonato Panamericano y el nacional de esa categoría.
Integró la directiva de equipos Cuba en función de coach en eventos
internacionales celebrados en México, Panamá, Corea, Venezuela y Aruba,
entre otros.
Lo recuerdo como un trabajador incansable, con excelentes métodos de entrenamiento físico y sobre todo tácticos, pues preparaba a sus peloteros en el terreno y frente a una pizarra magnética, en la cual explicaba una y otra vez los sistemas defensivos, las reglas del béisbol, las jugadas sorpresivas....fue un MAESTRO de alta pedagogía.
Fue una persona humilde y jovial que se ganó la amistad y simpatía de los avileños y de quienes lo conocieron en otras latitudes.
Donde quiera que estés, amigo Mayito, mi admiración y cariño de siempre.
Lo recuerdo como un trabajador incansable, con excelentes métodos de entrenamiento físico y sobre todo tácticos, pues preparaba a sus peloteros en el terreno y frente a una pizarra magnética, en la cual explicaba una y otra vez los sistemas defensivos, las reglas del béisbol, las jugadas sorpresivas....fue un MAESTRO de alta pedagogía.
Fue una persona humilde y jovial que se ganó la amistad y simpatía de los avileños y de quienes lo conocieron en otras latitudes.
Donde quiera que estés, amigo Mayito, mi admiración y cariño de siempre.
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