subiendo de grados apenas me senté ante Google y coloqué: USAID+HIP
HOP+CONTRA CUBA y me aparecieron una gran lista de enunciados que fui abriendo poco a poco, para que no me afecte el corazón, para no despertar a mi niña, y para no contaminar el cálido ambiente hogareño con palabras indecentes.
En mis 38 nada de esto puede asombrarme. Sin ser Martí, y sin vivir en
el monstruo, le conozco también las entrañas. Porque cada día que pasa,
ese monstruo que respira y que busca el fin de la democracia cubana, va
buscando las distintas maneras de trocarlo todo, de volver patas arriba,
aquello que está bien y seguirá estando bien en esta isla.
Ahora es esto del Hip-Hop. Ahora son Los Aldeanos. Un grupo que si he
escuchado un par de veces es mucho, porque su contenido, no literario,
sólo su contenido, es lacerante y terrible para los oídos que, como los
míos, degustan hasta el paroxismo la música y las artes en sentido
general.
Estando de misión en Venezuela, tuve una discusión con un colega que
gustaba de Los Aldeanos, y yo exponía mi punto de vista diciéndole que,
como Fidel en las palabras a nuestros intelectuales «con la Revolución,
Todo, contra la Revolución Nada». Y era que ya me olía que ese grupo no
contaba con los presupuestos de los verdaderos revolucionarios.
Aquellos que decimos las cosas de frente en el lugar
preciso, a la hora precisa, y con el debido respeto, pero dentro de los deseos
de Revolución.
Y recuerdo que ponía ejemplos a lo silviano, a lo
Carlos Valera. Y ese
colega terminó dándome la razón. No sé si dejó de escuchar a Los
Aldeanos, pero al menos sé que le hice reflexionar sobre el papel de la
música, de la canción, y del compromiso.
«Washington, 11 dic (PL) La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) intentó infiltrar al movimiento musical hip-hop en Cuba, como parte de un proyecto encubierto para desestabilizar el país, según una investigación de la agencia informativa estadounidense The Associated Press (AP). Las revelaciones, que aparecen publicadas hoy en importantes medios estadounidenses y europeos, dejan al descubierto que la USAID contrató a un grupo de cantantes de rap para provocar un movimiento de jóvenes contra el gobierno cubano, de acuerdo con los documentos obtenidos por AP.»(http://www.cuba.cu/)
Los Aldeanos no tienen siquiera un concepto bien claro de lo que es
arte, de lo que es el alma. No son como otros grupos de Hip Hop que
saben manejar oportunamente la denuncia a tiempo, y el buen decir, con
poesía, dominio de nuestra cubanidad. Porque Cuba es una Isla cargada de cultura, tan grande, pero tan grande, que cuando no se tienen los
hombros amplios para asumir su peso, nos hunde y convoca a rendición.
A Cuba, a su Cultura, se le mira de frente y no se le anda con paños
tibios. Porque ningún artista que tenga en su sangre, la sangre de los
campos de Cuba, el arte y sus manifestaciones literarias, va caer en la
tentación de anexionarse al enemigo para conseguir un poco de
comodidades.
«El sitio digital Huffington Post publica este jueves una cronología de
las acciones encubiertas de la USAID en Cuba, que detalla las
actividades del "promotor musical" serbio Rajko Bozic, quien llegó a
Cuba con instrucciones de incorporar a su plan a raperos cubanos, entre
ellos el dúo Los Aldeanos, y poner en marcha un movimiento juvenil
opositor.» (http://www.radiocubana.cu/)
Si hay que anexionarse a alguien, nuestro deber es hacerlo a la Patria,
a los colores de su bandera, a los símbolos que fueron fronteras para
los opresores. Anexionarse, por sobre todas las cosas, al deber
patriótico de amar la tierra de nuestros mayores, de nuestra cultura.
«El plan subversivo, que se ejecutó por más de dos años, tenía como
premisa utilizar músicos cubanos para construir una red de jóvenes en
busca de "un cambio social" dentro de la Isla.
Entre los planes encubiertos encargados a los contratistas de la USAID,
estaba el de reclutar a decenas de músicos cubanos para proyectos
disfrazados de iniciativas culturales y festivales juveniles, pero en
realidad el objetivo era aumentar su visibilidad y avivar un falso
movimiento "artístico" que desafiara al gobierno de La Habana.»
(http://www.cuba.cu/)
Es abominable que todavía intenten envenenar la mente de los jóvenes que solo sueñan ser artistas y que los quiera al menos la densidad de un
público juvenil. Porque son productos también de una sociedad, de su
familia. Son productos de la desventura o de la carencia de algo. Pero
sin olvidar que esas carencias no pueden desbordar el alma, que es lo
único que es nuestro. Es lo único verdaderamente nuestro.
Y de Cuba. Porque si nacemos en esta tierra, todo lo que hagamos o
respiramos, todo lo que caiga sobre nuestra existencia, es indudablemente de ella. A ella nos debemos. Sin ella, nada tuviera sentido para ser.
Claro que no puedo dejar de sentirme un poco culpable, porque de alguna
manera, todos somos parte de la misma familia de la cultura, esa que
cumple aniversarios este 14 de diciembre. Si alguien en ella se
«enferma», es porque la dejamos enfermar, o porque «nos lo ha podrido el enemigo».
No tenga nada en contra de la Oposición, de alguna manera es necesaria,
pero de que hace daño y me sobran los deseos a veces de aniquilarla
para siempre, no lo puedo negar. Pero la tolerancia es una forma más de
convivencia. Y hay que vivir con ella. Con la oposición y la tolerancia.
Pero hay que amar a la Patria por encima de todas las cosas.
Por fin mi hija se despierta y voy a recibirla con un beso. En ese beso
va también la obra de Silvio, de Garay, de Martí, Heras León, Puig y
muchos otros que son Cuba.
colega terminó dándome la razón. No sé si dejó de escuchar a Los
Aldeanos, pero al menos sé que le hice reflexionar sobre el papel de la
música, de la canción, y del compromiso.
«Washington, 11 dic (PL) La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) intentó infiltrar al movimiento musical hip-hop en Cuba, como parte de un proyecto encubierto para desestabilizar el país, según una investigación de la agencia informativa estadounidense The Associated Press (AP). Las revelaciones, que aparecen publicadas hoy en importantes medios estadounidenses y europeos, dejan al descubierto que la USAID contrató a un grupo de cantantes de rap para provocar un movimiento de jóvenes contra el gobierno cubano, de acuerdo con los documentos obtenidos por AP.»(http://www.cuba.cu/)
Los Aldeanos no tienen siquiera un concepto bien claro de lo que es
arte, de lo que es el alma. No son como otros grupos de Hip Hop que
saben manejar oportunamente la denuncia a tiempo, y el buen decir, con
poesía, dominio de nuestra cubanidad. Porque Cuba es una Isla cargada de cultura, tan grande, pero tan grande, que cuando no se tienen los
hombros amplios para asumir su peso, nos hunde y convoca a rendición.
A Cuba, a su Cultura, se le mira de frente y no se le anda con paños
tibios. Porque ningún artista que tenga en su sangre, la sangre de los
campos de Cuba, el arte y sus manifestaciones literarias, va caer en la
tentación de anexionarse al enemigo para conseguir un poco de
comodidades.
«El sitio digital Huffington Post publica este jueves una cronología de
las acciones encubiertas de la USAID en Cuba, que detalla las
actividades del "promotor musical" serbio Rajko Bozic, quien llegó a
Cuba con instrucciones de incorporar a su plan a raperos cubanos, entre
ellos el dúo Los Aldeanos, y poner en marcha un movimiento juvenil
opositor.» (http://www.radiocubana.cu/)
Si hay que anexionarse a alguien, nuestro deber es hacerlo a la Patria,
a los colores de su bandera, a los símbolos que fueron fronteras para
los opresores. Anexionarse, por sobre todas las cosas, al deber
patriótico de amar la tierra de nuestros mayores, de nuestra cultura.
«El plan subversivo, que se ejecutó por más de dos años, tenía como
premisa utilizar músicos cubanos para construir una red de jóvenes en
busca de "un cambio social" dentro de la Isla.
Entre los planes encubiertos encargados a los contratistas de la USAID,
estaba el de reclutar a decenas de músicos cubanos para proyectos
disfrazados de iniciativas culturales y festivales juveniles, pero en
realidad el objetivo era aumentar su visibilidad y avivar un falso
movimiento "artístico" que desafiara al gobierno de La Habana.»
(http://www.cuba.cu/)
Es abominable que todavía intenten envenenar la mente de los jóvenes que solo sueñan ser artistas y que los quiera al menos la densidad de un
público juvenil. Porque son productos también de una sociedad, de su
familia. Son productos de la desventura o de la carencia de algo. Pero
sin olvidar que esas carencias no pueden desbordar el alma, que es lo
único que es nuestro. Es lo único verdaderamente nuestro.
Y de Cuba. Porque si nacemos en esta tierra, todo lo que hagamos o
respiramos, todo lo que caiga sobre nuestra existencia, es indudablemente de ella. A ella nos debemos. Sin ella, nada tuviera sentido para ser.
Claro que no puedo dejar de sentirme un poco culpable, porque de alguna
manera, todos somos parte de la misma familia de la cultura, esa que
cumple aniversarios este 14 de diciembre. Si alguien en ella se
«enferma», es porque la dejamos enfermar, o porque «nos lo ha podrido el enemigo».
No tenga nada en contra de la Oposición, de alguna manera es necesaria,
pero de que hace daño y me sobran los deseos a veces de aniquilarla
para siempre, no lo puedo negar. Pero la tolerancia es una forma más de
convivencia. Y hay que vivir con ella. Con la oposición y la tolerancia.
Pero hay que amar a la Patria por encima de todas las cosas.
Por fin mi hija se despierta y voy a recibirla con un beso. En ese beso
va también la obra de Silvio, de Garay, de Martí, Heras León, Puig y
muchos otros que son Cuba.
Por: Vasily M. P.
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