Soy una cubana que no sabe vivir sin su sol, su mar, su béisbol y los personajes y el bullicio de su barrio; aspiro a existir por 120 años, los cuales no me alcanzarían para escribir todo lo que siento y quiero.
Me acompañan la memoria de mi padre y mi hermano, ambos llamados Germàn, la presencia de mis otros hermanos, Ronald y Jorge, de todos ellos he aprendido a luchar fuerte por lo que soy y quiero, a ellos, a mi madre, mi tía y mis amigos incondicionales dedico mi modesta obra.
Vivo en una Isla del planeta, linda, fuerte y única. En mi país las cosas se mueven constantemente y los milagros son cotidianos.
Si quieres echa una mirada día a día y descubre que nuestras realidades son diferentes.
Gracias por visitarme...acomódate, estás en tu casa...
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