Que la tasa de
mortalidad infantil de este año en la provincia de Ciego de Ávila esté en 3,9
por cada mil nacidos vivos, demuestra el efectivo trabajo desarrollado por el
engranaje médico necesario para este indicador de desarrollo social de un país.
Dicha cifra
está por debajo de la media nacional e inferior a la del pasado año en este
territorio central de la isla.
En la
provincia de Ciego de Ávila, hasta la fecha,
han nacido vivos 4 108 niños y de
estos, sólo 16 fallecieron. Se lamenta una muerte materna, proveniente del
municipio de Bolivia.
Chambas y Ciro
Redondo son municipios de están provincia
que están con cero mortalidad infantil durante el 2013.
En la sala
de Neonatología del Hospital Provincial Doctor Antonio Luaces Iraola, de la
ciudad de Ciego de Ávila, la tasa es más baja aún: 3 en la escala de cada mil
nacidos vivos. Allí sobrevivieron 13 de los 14 bebés que nacieron con menos de 1 500 gramos de peso
corporal y seis de los cuatro que pesaron inferior a los 1 000 gramos.
 |
| Neonato con peso inferior a los 1 500 gramos. |
Estos
simples datos evidencian que en el territorio avileño se ha hecho este año una
mejor labor —desde la atención primaria de salud, en consultorios del Médico de
la Familia y
policlínicos—, hasta la atención secundaria, propiciada en los dos hospitales
generales, ubicados en las ciudades de Ciego de Ávila y Morón.
En lo que va
de año han sido más efectivos el adecuado pesquisaje y manejo del riesgo
preconcepcional, la captación precoz del embarazo y su seguimiento por un
equipo multidisciplinario, en interconsultas
con ginecólogos, estomatólogos, clínicos, dietistas, genetistas, trabajadoras
sociales y técnicos en sicoprofilaxis del parto.
Si la futura
madre presenta anomalías gestacionales, es ingresada en un Hogar Materno,
institución médica integrante del engranaje de Salud para lograr un nacimiento
pleno.
Ya con su término
de embarazo cumplido las mujeres pasan a la atención secundaria en los
hospitales. Las de riesgo ingresan en salas de perinatologia hasta el momento
del parto o la cesárea.
Inmediatamente
al nacimiento el bebé es examinado por un neonatólogo, quien valora por examen físico
general si madre e hijo pasan al alojamiento conjunto en una sala hospitalaria,
donde la mamá inicia la lactancia materna y le aporta al hijo el calostro (primera
secreción láctea-materna y primera vacuna que recibe el niño).
Los niños
que nacen con determinadas patologías son asumidos en el servicio de Neonatología,
donde la relación entre obstetra y neonatólogo favorece el diagnostico precoz
de cualquier complicación que pudiera tener el neonato.
Las
principales patologías que lleva, a los recién nacidos a estas salas son la
prematuridad, el bajo peso al nacer y el síndrome de dificultad respiratoria,
afirma el doctor Fernando Fernández Romo, jefe del servicio de Neonatología en
el hospital provincial.
La neonatología es una especialidad médica muy costosa por
su nivel de especialización y el equipamiento que requiere, aún así, en Cuba es un servicio que se presta en todas las provincias y en Ciego de Ávila existen en la ciudad capital y en Morón.
Por: Idania
Pupo Freyre
Fotos de Ana
Iskra e Iván Paz
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